miércoles, 1 de julio de 2009

PICO SAN MILLÀN






ASCENSIÓN AL PICO SAN MILLÁN (2.131 METROS). BURGOS. COMUNIDAD AUTÓNOMA DE CASTILLA Y LEÓN. 27 Y 28 DE JUNIO DEL 2009.

Dentro del programa “Techos de España”, la FEMAD-SEMED dio la bienvenida a la temporada estival con la ascensión al pico San Millán, el más elevado de la fría pero al mismo tiempo acogedora provincia Burgalesa.
Comencemos por repasar unas nociones generales de la zona.

La Sierra de la Demanda es un espacio natural protegido y comarca perteneciente a la Cordillera Ibérica, en los límites de las provincias de Burgos, La Rioja y Soria.A la sombra de sus majestuosas y casi siempre nevadas cumbres se combinan una serie de elementos paisajísticos y humanos que convierten a la zona en un atrayente paraíso natural y turístico. Junto a unos frondosos y extensos bosques se localiza una inacabable sucesión de lagunas de origen glaciar.
El pico más alto, situado en La Rioja, es el San Lorenzo (2.270 metros), en cuya ladera se encuentra la estación de esquí de Valdezcaray. El siguiente pico, el más alto de la Provincia de Burgos, es el San Millán (2131 metros). En su vertiente sur se encontró ubicada, en su día, la estación de esquí de Valle del Sol, cercana a Pineda de la Sierra (Burgos).
Por otro lado, en esta provincia, Salas de los Infantes es el principal núcleo de población al sur de la sierra; al norte de la misma resaltar como núcleos principales Belorado y Pradoluengo.
Volviendo al relato de los hechos decir que la hora de partida desde el punto de encuentro establecido en Madrid, fueron las 17,45 horas, dormimos en el pueblo Búrlales de Arlanzòn.
Al día siguiente nos levantamos a las 7,30 horas y tras desayunar y hacernos unas fotografías tomamos los vehículos en dirección al punto de inicio de la marcha; eran las 8,45 horas.

Primeramente pasamos a lo largo del embalse de Uzquiza cogiendo a la derecha la carretera BU P-8201 a Pineda de la Sierra; en su camino pasamos un segundo embalse, el de Arlanzón.
Tras preparar el equipo, a las 09,55 horas iniciábamos la marcha, la cota del punto de salida era de 1.240 metros.

Hablemos ahora del itinerario de ascensión que seguimos para llegar al Pico San Millán.:
Como hemos dicho, iniciamos la ascensión en el pueblo de Pineda de la Sierra. Después de atravesar el río, a la altura de los indicadores de final del pueblo, sale a la izquierda una pista que a los pocos metros, junto a una casa, hay que dejar para tomar la loma que a la derecha asciende fuertemente hacia lo alto del romo cordal; después de un corto recorrido por una zona arbolada pasamos por el descampado de la loma de los Helechares hasta entroncar con una pista que asciende hasta el collado Tres Mojones.
Antes de llegar al citado collado nos desviamos por una senda en dirección oeste por lo que la parte final de la ascensión la realizamos por la loma que une el San Millán con el Trigaza.
A las 13,20 horas la totalidad del grupo llegaba a la cima del San Millán con su cota de 2.131 metros.
Como datos decir que habíamos tardado 3 horas 25 minutos en salvar una diferencia de nivel de 931 metros.

La vista desde el vértice geodésico que marcaba el punto más elevado era fabulosa en un día claro como el que nos había tocado; pudimos divisar el pico San Lorenzo y más cercano el Trigaza., al fondo Somosierra. En el valle, entre otras localidades destacar Santa Cruz del Valle del Rubión

Como aspecto menos destacable, a lo largo de toda la ascensión se aprecia una multitud de pistas, que, al margen de poder dar variedad a los distintos recorridos, desnaturalizan la belleza de la montaña.
Aprovechamos para comer los bocadillos que llevábamos, a comentar los diferentes puntos de la ascensión y a hacernos la obligada y clásica fotografía del grupo en la cumbre. A las 14,20 horas iniciábamos el descenso.

El inicio del descenso lo realizamos por el cordal hasta llegar al collado Tres Mojones. Desde este punto deshicimos el camino de la subida hasta llegar a Pineda de la Sierra. Eran las 16, 45 horas por lo que el descenso nos costó 2 horas 25 minutos.
Teniendo en cuenta que las condiciones climatológicas de la jornada habían sido buenas, que el firme del terreno también se encontraba en buenas condiciones y que la pendiente no presentaba grandes desniveles se puede concluir que esta ascensión constituyó una agradable marcha de montaña.

Finalmente destacar la belleza de este pueblo serrano, Pineda de la Sierra. Añadido al entorno natural, la armonía en la construcción de las edificaciones hacía del conjunto algo agradable y bonito.

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